“Mi madre adoptiva siempre me ha dicho que no importa de dónde vienes, sino adónde vas”, dijo Angel Thomas, de 22 años.
Hay personas que deben enfrentar los momentos más difíciles de su vida apenas llegan a este mundo. Es por eso que se pueden conocer las historias de bebés que han sido abandonados a su suerte luego de que sus padres se dieron cuenta que no podían cuidarlos.
Uno de estos bebés fue Angel Thomas, quien en 1999 fue abandonada cuando era tan solo una bebé, debajo de una escalera exterior en un complejo de departamentos en la ciudad de Greensboro, en Estados Unidos.
Así, Angel fue creciendo y venciendo cada uno de los obstáculos que se le ponía en el camino. Se crió en Gibsonville y fue a la escuela secundaria de T. Wingate Andrews, en donde demostró que era capaz de realizar distintas actividades de desarrollo de jóvenes y puso a prueba sus capacidades de liderazgo.
Quizás si su familia adoptiva no la hubiera encontrado debajo de esas escaleras su vida podría haber sido muy distinta. A pesar del peso de su pasado, Angel se dio cuenta que lo único que tenía que hacer era preocuparse del presente y del futuro, y darlo todo para cumplir sus sueños.
Uno de esos sueños era entrar a la universidad y graduarse. La joven logró entrar a la Universidad Aeronáutica Embry-Riddle, de donde salió con una licenciatura en Aeronáutica y especialización en negocios y Seguridad Ocupacional.
“A través de todo lo que sucedió en mi vida, simplemente mantuve esta actitud de ser positivo y mantenerme enfocada hacia el futuro y saber que, aunque tu pasado es parte de ti, no es algo que te va a definir“, explicó la joven de 22 años.
Angel explicó que en algún momento pensó en ser piloto pero aconsejó a los jóvenes que “está bien cambiar de opinión” en la vida, y que lo importante es hacer lo que a uno le apasione.
“No tienes que tener cada cosa resuelta a lo largo de todo tu viaje como estudiante universitario. Solo sigue tu corazón y haz lo que te parezca correcto y ahí es cuando realmente encuentras tu felicidad como estudiante”, agregó.
La joven se siente muy agradecida por su familia adoptiva, quienes la criaron durante su vida. “Mi madre adoptiva siempre me ha dicho que no importa de dónde vienes, sino adónde vas“, dijo Angel.
Ahora se prepara para ingresar a la industria de la Seguridad Ocupacional. Su objetivo es ser gerente de seguridad en alguna compañía.
