El huracán Ian tocó tierra este miércoles 28 de septiembre en el oeste de Florida como un huracán de categoría 4; los efectos del potente fenómeno meteorológico comenzaron a percibirse con mayor intensidad después del mediodía, tiempo del este, luego que el ojo del huracán tocara tierra con vientos sostenidos de 240 kilómetros por hora.
A la par que el meteoro ingresaba por la península sus efectos se hicieron palpables, desde la intensa lluvia, los vientos incesantes y el incremento en el nivel del mar, conocido como marejada ciclónica (puede elevar el nivel del mar hasta 1.80 metros en determinadas áreas de la costa oeste de Florida) y que provocó que el agua entrara hasta calles e invadiera avenidas al tiempo que arrasaba con todo a su paso: casas, árboles e incluso vehículos.
Ian perdió fuerza la noche de este miércoles en su paso por el centro de Florida, ahora, convertido en una tormenta tropical, todavía capaz de hacer daño con «catastróficas inundaciones» y vientos racheados. El Centro Nacional de Huracanes (NHC) de Estados Unidos advirtió de que Ian va a producir vientos, lluvias fuertes y marejada ciclónica en áreas de la costa este de Florida, en Georgia y las Carolinas.
Los daños de Ian en el litoral del Golfo de México, una zona turística y no muy densamente poblada, aun están por cuantificar, pero las imágenes televisivas muestran que fueron significativos, especialmente por las entradas del mar en la tierra a causa de la marejada ciclónica.
Sábado Ian comenzará a debilitarse
Ian se mueve ahora hacia el noreste a cerca de 13 km/h y se espera que más tarde gire al nornoreste, seguido por un giro hacia el norte y nornoroeste con un aumento en la velocidad de traslación el viernes. El pronóstico de trayectoria del NHC indica que el centro de Ian se moverá fuera de la costa este-central de Florida hoy y luego se acercará a la costa de Carolina del Sur el viernes.





