Bass es un pastor alemán que sirvió en el Cuerpo de Marines estadounidense y que fue otorgado con una de las mayores condecoraciones que un animal puede recibir. El perrito, en un periodo de seis años, ayudó a conducir más de 350 misiones para encontrar explosivos.
En específico hoy se le condecora por haber encontrado bombas hechas con explosivos improvisados durante una redada a los talibanes. Hoy Bass tiene 10 años, aproximadamente 53 en años humanos, por lo que disfruta de una vida en el retiro con su exadiestrador de la milicia, Chris Willingham.
La asociación PDSA, una organización animalista, fueron quienes crearon la medalla otorgada al peludito. Jan McLoughlin, directora general del PDSA, afirmó: “Bass demostró evidente valentía y devoción al ayudar al éxito de la misión de su equipo una jornada de 2019. Sus acciones sin duda evitaron víctimas mortales adicionales“.





