Proceso.-Los exgobernadores tamaulipecos Eugenio Hernández y Tomás Yarrington y los coahuilenses Jorge Torres López y Humberto Moreira estarían implicados en el lavado de 699 millones de pesos provenientes de dos fuentes: el erario y sobornos del narcotráfico a cambio de favores.
Según se desprende de documentos de cortes federales de Texas, en esa compleja red de corrupción habrían participado también el extesorero de Coahuila, Javier Villarreal Hernández, y el secretario de Desarrollo Social de Tamaulipas, Homero de la Garza Tamez, además de cuatro empresarios, entre ellos Guillermo Flores Cordero, originario de Torreón, Coahuila, quien presuntamente lavó alrededor de 30 millones de dólares.
De acuerdo con los fiscales estadunidenses, parte de esos recursos eran sobornos de Los Zetas que fueron entregados a Eugenio Hernández.





