CANAL 44.- Cansado de las protestas de los jugadores de Brumadinho y Amantes da Bola, de la división amateur Belo Horizonte, el árbitro brasileño Gabriel Murta decidió poner fin a la discusión alsacar una pistola en medio del partido.
El árbitro, que también trabaja como policía militar, tomó la pistola que tenía en el vestuario, la llevó al campo de juego y amenazó a los jugadores que reclamaban una tarjeta roja para un rival.
“Lo que pasó obviamente no es algo normal, pero no quiero apresurar nada. En ese momento tomó su arma porque quiso controlar la situación”, explicó el jefe de la asociación de árbitros, Giulinano Bozzano.





