Parecía perdido cuando se confirmó que la lesión era más grave de lo que se pronosticaba en un principio, pero Andrés Guardado ya no se descarta para jugar ante Estados Unidos.
El mexicano, quien recién cumplió 29 años de edad y lo conmemoró cortando los rizos de su cabeza, salió lesionado por un golpe de tobillo el 15 de septiembre en la victoria contra el Manchester United por la Champions League, sin embargo el mediocampista es optimista con su intención de participar en el juego del 10 de octubre contra Estados Unidos.
Ese partido es un duelo único para ganar un boleto a la Copa Confederaciones de 2017 y como era en un principio, cuando parecía que el golpe era menos grave, la ilusión del jugador es estar en California y colaborar para vencer al acérrimo rival deportivo.
“Los jugadores somos tercos y un poco obsesivos con querer estar antes y querer jugar los partidos. Lo peor que le puede pasar a un jugador es estar fuera, estar lesionado y obviamente yo no soy la excepción”, dijo el jugador en entrevista para TDN. «Quiero regresar lo antes posible y por eso hemos trabajado fuerte, para estar en los partidos importantes»
El mexicano, que el viernes regresará a los entrenamientos con el equipo holandés, afirmó que no adelantará los procesos ni forzará su regreso, pues eso le podría traer como consecuencia más juegos perdidos, sin embargo fantasea cada vez que piensa en el duelo contra Estados Unidos.
“Desde que terminó la Copa Oro todos estamos pensando en ese partido. Va a ser muy intenso porque además del pase a la Confederaciones nos jugamos el orgullo; muchas cosas que hay de por medio entre Estados Unidos y México”.
Han sido tiempos complicados para la Selección Mexicana en cuanto a lesiones y aunque el regreso al campo de Rafael Márquez es más complicado, el heredero de la capitanía Andrés Guardado avisa que aún no lo descarten para el ‘repechaje’ a Copa Confederaciones.





