ESPN.- Mientras que la afición rojiblanca seguía ovacionando a Chivas, por hacerse del título de la Supercopa y del repechaje de la Copa Libertadores, el dueño de los rojiblancos, Jorge Vergara, no cabía en sí de emoción y las lágrimas amenazaban con traicionarle.
El ver coronarse al equipo, que no hace 
mucho tiempo peleaba por el no descenso, supuso un gusto enorme para el propietario del Rebaño.
“Es muy bonito, muy emocionante”, dijo el dirigente a la cadena Univisión, mientras tocaba la segunda medalla de campeón que ha ganado el equipo en la era del argentino Matías Almeyda.
Tras decir que el título se lo dedica especialmente a su hija Kenia, comentó que ya era hora regresar a la justa sudamericana- “Queríamos volver para lograr lo que no una vez se nos negó en la final que jugamos”. Chivas perdió el título sudamericano ante Internacional de Porto Alegre en 2010, con marcador de 3-2 en Brasil.
Vergara comentó que hay Almeyda “para mucho rato”. Luego señaló que está muy agradecido con el capitán Omar Bravo, anotador del segundo gol con el que Chivas se impuso 2-0 a Veracruz esta tarde. “Ha sido un jugador insigne” del club.
El dueño de Chivas habló poco, pero de forma significativa. Siempre estuvo al borde de las lágrimas, muy emocionado por el logro. Después de sus palabras se unió a sus jugadores y el cuerpo técnico para seguir celebrando en la cancha del StubHub Cente
