Las compañías Soriana y Productora Agrícola «La Campiña» se deslindaron de la intoxicación de dos menores de edad que consumieron fresas contaminadas con metales pesados en Matamoros.
Juan Manuel Mendoza, padre de las niñas de 13 y 10 años de edad informó su intención de comenzar un proceso penal en contra de las 2 compañías por su negación a costear exámenes médicos después de que consumieran los alimentos contaminados.
«Lo que yo estoy pidiendo es que se hagan responsables de costear exámenes en los 3 meses que siguen para descartar que mis hijas tengan un daño en su salud ya que comieron esas fresas que habían sido empacadas con un balín y un tornillo de fierro».
Como prueba de su dicho anexo las imágenes que acompañan esta información y en las que se observa claramente las piezas metálicas mezcladas con las fresas.
«Las niñas y yo que comimos esas fresas nos empezamos a sentir mal al día siguiente si es cierto que por órdenes de Soriana se nos hicieron unas pruebas en el CEMQ pero como dicen podría haber un daño mayor que se puede manifestar más adelante y por eso yo quiero que sigan pagando los exámenes».
Dio a conocer que hasta hace unos días la empresa de Guanajuato y procesadora de las fresas contaminadas Productos Agrícolas «La Campiña» le ofrecía 12 mil pesos para costear el tratamiento.
«Pero al momento que sale la información en el periódico me dijeron que ya no me iban a dar nada porque como quien dice los queme, y que le haga como quiera por eso es que voy a demandar por la vía penal».
En la lucha, Juan Manuel Mendoza y sus hijas no están solos pues cuentan con el apoyo de la Comisión Estatal de Protección contra Riesgos Sanitarios cuyo jefe de unidad Óscar García Hinojosa ordenó una verificación en la tienda Soriana y un análisis sobre las fresas que vende «La Campiña» a los habitantes de Matamoros.





