Una vez más salió el tema de lo que distingue a Michoacán y Tamaulipas en cuanto a inseguridad, lo que propicio una estrategia específica para cada estado.
Como lo dijo en rueda de prensa el secretario de Gobernación, MIGUEL ÁNGEL OSORIO CHONG, en el sentido de que entidades de la república son diferentes en sus regiones y particularidades y, por tanto, eso debe considerarse al pergeñar un plan para combatir al mal.
Ante representantes de medios, el funcionario federal estableció, el pasado viernes en Nuevo Laredo: “tal vez pueda ser el mismo delito pero la forma de operar (de los delincuentes) son muy distintas”.
Luego admitió que en Michoacán el crimen organizado había penetrado los diversos ámbitos, “no sólo el gubernamental, sino también de la misma sociedad”.
Sin lugar a dudas que tiene razón el funcionario, pero tampoco podemos llegar a la conclusión de que en Tamaulipas el crecimiento de los bandas delictivas se dio al margen de los gobiernos y de la complicidad de elementos de la iniciativa privada, por temor o simple y llanamente, debido al negocio.
Y ni que decir de otros ámbitos de la sociedad, sindicatos, organizaciones civiles y, en un descuido, hasta personajes de partidos políticos.
Al menos eso versión ha corrido y si bien cambiaron las circunstancias a la fecha, no estaría de más que la alta jerarquía que anima la estrategia de seguridad, lleve a cabo una revisión minuciosa de lo sucedido en los municipios-antes y ahora-, y en otros ámbitos institucionales.
Ni modo que donde se ha dado una presencia notable de los delincuentes, éstos renunciaran a la posibilidad de imponer sus designios o en el aspecto político o en áreas de la administración pública municipal.
Es de esperar que el punto no sea el de “borrón y cuenta nueva”, en tanto que han quedado marcadas señales, incluso de muertes.
Recordemos que en otro momento, se hablaba de la contaminación de los espacios de seguridad pública, al grado de que, si bien sus jefaturas reales estaban en la estructura gubernamental, en la realidad no necesariamente seguían sus directrices.
De hecho en fechas recientes se ha dado de baja o puesto a disposición a elementos de seguridad por pérdida de la confianza o al comprobárseles relación grupos criminales.
En fin, aún se está en una situación compleja porque es iluso creer que las estructuras de las mafias están a punto de ser fracturadas. Ello sin demérito de los avances mostrados en la implementación de la estrategia de seguridad, puesta en marcha desde la primera quincena de mayo.
Lo anterior quedó de manifiesto en la reunión del viernes encabezada por OSORIO CHONG y el mandatario, EGIDIO TORRE CANTÚ.
A propósito, en una de las intervenciones del ejecutivo estatal, reconoció el respaldo que ha tenido su administración de parte del gobierno de la república.
En su mensaje estableció que uno de los datos significativos de ese respaldo se refleja en cuanto a aeronaves destinadas al aspecto de seguridad. “Tenemos el apoyo de 15 helicópteros-yo creo que no hay nadie más que tenga el apoyo total”, sostuvo.
Cabe mencionar que durante el encuentro se informó que, a 75 días de poner en práctica tan importante propuesta de trabajo, se han alcanzado metas significativas, entre otras la disminución de los
delitos de alto impacto (secuestro, extorción, homicidio, robo con violencia, etc.).
Se dio cuenta de que se ha logrado detener o abatir a 7 de los 14 líderes delincuentes que ubico la autoridad, dentro de los más encumbrados en la estructura de los grupos criminales que operan en la entidad.
También se ponderó el hecho de que los tamaulipecos cada vez tiene más confianza en las autoridades, lo que, según los informes, se refleja en un aumento considerable de las denuncias ciudadanas. Los datos muestras que se pasó del lugar 21 al 4 (en el ámbito nacional) en cuanto a confianza de las personas para utilizar el 088.
Dese luego que hay fundamento en torno a lo que se dijo en Nuevo Laredo. Las cifras son ilustrativas, Sin embargo, no es lo más adecuado sacar la matraca y no parar en aplausos por lo que se ha hecho. Se reconoce lo emprendido y los resultados, además de estar de acuerdo con las autoridades al afirmar que falta buen trecho por andar.
Cabe señalar que en el evento de Nuevo Laredo, el alcalde, CARLOS ENRIQUE CANTÚ ROSAS VILLLARREAL, ponderó el trabajo realizado por los órdenes de gobierno.
“Los índices delictivos han bajado en todos los sentidos, hoy creo que nadie puede negar que aquí en Nuevo Laredo, Tamaulipas, gracias a la ayuda del presidente de la republica don ENRIQUE PEÑA NIETO y a la coordinación que tiene el secretario de gobernación, con todo el gabinete de seguridad nacional y la ayuda, por supuesto, del gobernador, Nuevo Laredo está recuperando su libertad y su grandeza”.
Sin duda dicho personaje, presuntamente de filiación panista aunque gusta de asumirse de extracción ciudadana, le va entendiendo al tejemaneje de la grilla.
De antemano sabe que es mejor llevar la “fiesta en paz”, sobre todo si ha visto logros en materia de seguridad.
Caso contrario es la alcaldesa de Matamoros, LETICIA SALAZAR VÁZQUEZ, cuya estridencia puede llevarla a estropear sus planes a futuro.
Eso no implica que deba autocensure pero tampoco que ande buscando camorra, un día sí y el otro también, con quienes considera adversarios.
Lo cierto es que, con sello o sin sello político, el tema de la seguridad avanza, para bien.
AL CIERRE
Este día se realiza el cumplimiento de la forma para el ungimiento de la nueva lideresa del Organismo Nacional de Mujeres del Partido Revolucionario Institucional (ONMPRI).
Se habla de que el registro para las aspirantes se abre de las 10:00 a las 15:00 horas.
Doble contra sencillo que nada más se enlistará SUSANA HERNÁNDEZ FLORES.
Se sabe que, la hermana del ex gobernador, acudirá en punto de las 12:00 horas, ante la Comisión de Elecciones.
Es evidente que con el regreso de la fémina a estas lides se le abre su panorama a promisorio de cara a los comicios por venir. Más en un escenario en donde la repartición de puestos de elección popular tendrá que ser del 50% para las mujeres.




