En verdaderas condiciones de hacinamiento y precariedad, 404 estudiantes de la primaria Rodolfo Torre Cantú en la periferia de Matamoros sufren la temporada invernal debido al abandono de la Secretaría de Educación de Tamaulipas.Y es que a más de un año de la fundación del plantel -en junio del 2014- recibe a unos menores de las colonias Misiones I y II, con altos niveles de marginación, y carece de la infraestructura básica: las aulas no son mas que 4 casas de madera desvancijadas, regaladas por grupos altruistas, y a falta de servicios sanitario los niños acuden a letrinas que por viejas están a un paso del colapso.
José Santos Barron, director del plantel, señala que continúan a la espera de que las autoridades estatales autoricen la construcción de aulas de concreto y así los menores puedan aprender en condiciones dignas.
«Ya que ahora es un riesgo para la salud el que lleguen y el aire se filtra a los salones, por les pedimos a los padres que los mande bien abrigados porque se siente igual de frió adentro que afuera y lo que no queremos es que los niños se enfermen».
Explico como la directiva, maestros y padres de familias han solicitado el apoyo de la Secretaria de Educación de Tamaulipas, que inició la construcción de un aula, pero la obra se abandono desde el año pasado.
«Por eso es que funcionamos a dos turnos, los niños de primero a cuarto vienen en la mañana y los de quinto y sexto en la tarde, porque no tenemos donde meterlos, ahora con el invierno encima la situación empeora».





