Frente al cúmulo de denuncias en las redes sociales de Reynosa, donde madres de familia manifiestan su temor a que sus hijos les sean robados, la activista fronteriza Eva Reyes González agarra el toro por los cuernos:
«Reynosa merece tener una alerta para que contemos con autoridades que se encarguen de este asunto, fuera real o no la existencia de una banda organizada dedicada al robo de niños, esto tiene que ver con la prevención y una manera de hacerlo es con las alertas que ya instituto la PGR y que en Tamaulipas no se ha tomando en cuenta».
Como el resto de las mujeres fronterizas, Eva ha visto las publicaciones colgadas en los diferentes muros y grupos de madres de familia en las que se alerta por la presencia de personas sospechas que en las afueras de tiendas departamentales se dedican a tomar fotos de los pequeños y luego seguirlos junto con sus padres.
De acuerdo a lo mencionado por la integrante de la organización Ayuda Humanitaria por Reynosa, corresponde a las autoridades activar a los protocolos, orientar a la población y esclarecer las denuncias públicas que se han presentado antes de que el pánico termine por enraizarse en la comunidad.





