Fiel a un estilo pichicato que le aprendió a su esposo, Carlos García González, la diputada panista Ivett Bermea Vazquez quizo quedar bien con los ancianos que visitan la Plaza Allende y se bajo a regalarles unos cubrebocas pero de la mas baja calidad.
Mientras ella ostentosa portaba uno de tres filtros, al igual que sus colabores, muy diferentes a los que regalo a los adultos mayores se trasparentaban de corrientes.
Por si fuera poco, para entregarlos exigió que se dejaran tomar la foto y así poderlas subir a redes sociales ostentando de ayudar a los ancianos durante la pandemia.
Se trata de una política oportunista que busca reflectores pregonando ayudas por demás raquiticas, como la que se le descubrió el fin de semana pasado cuando su propio equipo de prensa elaboro un boletín donde aparece entregando un paquete de pañales de los que donan en Estados Unidos.





