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Dentro de los personajes que quieren tomar las riendas de la alcaldía de Matamoros, se encuentra Jesús Roberto Guerra Velazco, quien ya fue alcalde de la ciudad, por cierto con controversias entre buen trabajo en infraestructura, así como servicio social, pero tal vez malo en la justicia.

Sin duda hay quienes cuentan que fue una de las mejores obras sociales que se pudieron dar, fue durante los tiempos de Jesús Roberto Guerra, potentado empresario de Matamoros, quien hizo mucho por los ciudadanos y que ahora sigue haciendo con su fundación “Matamoros lo llevamos dentro”, ahora más pegado, porque quiere ser alcalde.

Ya lo ha dicho en varios medios de comunicación que si la gente le da la oportunidad, lo aceptaría con mucho gusto, hasta de forma independiente, pues fue expulsado por Tomás Yarrington del consejo político del PRI, hace ya varios ayeres.

Ta vez Jesús Roberto Guerra recuerde bien el 7 de julio de 1986, cuando estaba fuera de la ciudad, pero que en Matamoros se avecinada una gran tragedia para el periodismo de la nación, la muerte de dos aguerridos periodistas.

Ernesto Flores y Norma Moreno, ello fueron asesinado de forma violenta por un sujeto que estaba haciendo ejercicio frente al Deportivo Bancario, donde se ubica el periódico El Popular, en aquellos años uno de los más críticos de la administración municipal.

Todo esto sucedió aproximadamente a las 7:00 horas de ese 7 de julio, donde por cierto Jesús Roberto no estaba en la ciudad y que coincidentemente era cuando ocurrían los asesinatos de personas en Matamoros.

Después del asesinato, en la revisa Proceso, fechada el 1996/08/02, se publicó una información sobre la entrevista que diera la esposa de Ernesto Flores, de nombre Amelia Gil Zaragoza, quien acusó directamente al entonces presidente municipal, Jesús Roberto de la muerte de su esposo, así como su compañera, los dos periodistas de la ciudad.

Horas después, La viuda del periodista incluso acudió a la presidencia municipal para buscar al alcalde, pero fue recibida por el entonces secretario del Ayuntamiento, Max Castillo, por cierto después fue procurador cuando Tomás Yarrington fue gobernador, quien le dijo “Primero entierre a sus muertos”.

La señora Amelia solo lo quería ver de frente para preguntarle que si había sido él quien los mató, pero la gente de seguridad y los colaboradores del alcalde Jesús Roberto, prefirieron que no se acercar por temor a represarías.

Al final las investigaciones, como en otros casos, no llegaron a nada y al crimen se quedó impune, ante el temor de los comunicadores, quienes desde la presidencia municipal les amenazaban para que no publicaran cuestiones críticas en contra del alcalde.

Por ahora, Jesús Roberto Guerra quiere ser alcalde de Matamoros y hasta donde sabemos si no es por el PRI, lo podría ser de forma independiente, donde por cierto el tricolor podría tener muchos problemas en caso de que si se lanzara.

Sin embargo será interesante que la gente de Matamoros conozca la historia de cada uno, pues hasta donde sabemos, existe un acuerdo entre familia, que si no es Jesús Roberto, podría ser su yerno, Alfonso Sánchez Garza, quien también ya fue alcalde, pero de él hablaremos mañana.

POR AQUÍ Y POR ALLÁ

El que anda muy encuerdado es Enrique Cárdenas del Avellano, pues ya anda recorriendo varios municipios como si anduviera en campaña, pero creemos que le está fallando la estrategia de quien le maneja los medios de comunicación.

Que alguien le diga que se ve muy elitista cuando llega a una ciudad y solo visita ciertos medios de comunicación, porque al menos la raza quiere una entrevista, aunque sea en la banqueta, pero en fin el reflector lo quieren ellos… Hasta aquí la dejamos.

RETASO

Tú pasado te condena o ¿te hace impune?

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