Aisladas, como en un mundo aparte, dos mujeres pasan sus noches y sus días en el encierro y miseria aplastante de un vetusto edificio a punto de desplomarse en la colonia Miguel Hidalgo, a las orillas de Matamoros.
Se trata de María Briseño Merel, una anciana que no recuerda ya su edad, que vive y duerme en una casa vieja y a punto de derrumbarse en la Colonia Miguel Hidalgo, acompañada solo de su hija de treinta años que tiene la enfermedad de síndrome de down y no puede valerse por si misma.
Ambas en su soledad, viven en muy malas condiciones y tienen que dormir en un sillón y en un pequeño colchón.
Comentó la Señora María, no recordar su edad y solo dijo que no tenía absolutamente nada que comer y que muchas veces su hija se duerme con dolores por tener el estómago vació.
Solo pudo recordar que es de León, Guanajuato además también se acordó del nombre del que alguna vez fue su esposo, Everardo de la Mora y que juntos tuvieron hace más de 15 años una tienda de abarrotes donde se encuentra actualmente solo que hoy en día es una casa de dos pisos a punto de derrumbarse.
En entrevista con el Director del Sistema DIF Matamoros, David Morales expresó su preocupación por este tipo de casos y hace el llamado a todos los familiares de abuelitos para que les presten toda la atención posible y puedan disminuir este tipo de casos.
Terminó comentando que estarán haciendo recorridos por las colonias para poder salvar a ancianos que se encuentran viviendo en estados muy miserables.





