Hay hijos que harían todo lo posible para entregarles un buen momento a sus padres, sobre todo si se trata de adultos mayores que han vivido situaciones difíciles, como por ejemplo enfermedades graves.
Así fue como lo pensó Christine Gilbert, una joven de Edmonds, Estados Unidos, cuando supo que su madre, Colleen, fue diagnosticada con un cáncer cerebral terminal hace dos años.
La mujer, quien está soltera, quiso que su madre pudiera tener un día especial antes de que su enfermedad se agravara más, por lo que decidió ir a comprar un vestido de novia con ella para que así la pudiera ver como si fuera a subirse al altar.
Según información del medio King5, Christine quería crear en ella distintos recuerdos para que su madre pudiera vivirlos antes de su muerte.
“¿Cuáles son las cosas que hacen una madre y una hija? Esto es algo que se me ocurrió especialmente porque ella me dice siempre: ‘Realmente quiero verte casada‘“, explicó Christine, quien arrendó una limosina para llevar a su madre y a toda su familia hasta la tienda de vestidos Kita Bridal.
Tanto para ella como para su madre fue un día muy emotivo, ya que estaban acompañados de más miembros familiares tal como si Christine se fuera a casar de verdad. De hecho, la propietaria de Kita Bridal, Krista Larrison, les organizó una fiesta sorpresa de forma gratuita.
En el lugar, Christine se probó varios vestidos para su madre, quien estaba visiblemente emocionada. “Fue genial perdernos en eso por un día y embarcarnos en ese viaje salvaje y fantástico“, dijo la joven.
Gracias a ese gesto de la joven, Colleen pudo cumplir uno de sus sueños. “Lo pienso y casi rompo a llorar. Creo que todo el mundo hace planes. Luego, en un momento dado te preguntas si se harán realidad y simplemente no lo sabes“, finalizó la anciana.
