A dos días de haber sido reinstalados por la Junta de Conciliación y Arbitraje en sus antiguos puestos de trabajo, un grupo de priistas fue nuevamente desterrado de la Presidencia Municipal de Matamoros.
Sólo dos días les duró el gusto al grupo de 25 personas que el lunes regresaron victoriosos al edificio de la calle Sexta para luego salir como perros regañados y con la cola entre las patas.
Alfredo Cortes Elizondo relata cómo fue su fugaz regreso a la Presidencia Municipal.
«Llegamos el lunes y nos pidieron esperar en las áreas donde estábamos en mi caso la Secretaría de Desarrollo Social donde como el señor Luis Biasi no estaba la subsecretaría nos dijo que nos quedáramos en la recepción, el martes paso igual pero la jefa de Recursos Humanos de nombre Erika nos pidió que ya no nos presentáramos el miércoles porque no tenía trabajo para nosotros».
Para este viejo lobo de mar priísta, está situación representa una nueva ofensa para quienes en octubre del año pasado fueron dados de baja con el inicio de la nueva administración municipal encabezada por Leticia Salazar Vázquez.
«Yo le pido a la presidenta municipal que reconsidere porque sólo nos está ocasionando un daño moral, sobre todo a nuestras familias que se ilusionaron pensando que por fin íbamos a regresar a trabajar y ahora en que otra vez nos corrieron».
Para este ex regidor del Ayuntamiento y quien al momento de ser despedido tenía 8 años de antigüedad laboral, ante este nuevo desaire no hay otro camino que continuar con el pleito laboral contra la Presidencia Municipal.
«El litigio sigue porque por un lado no nos quieren reinstalar y por el otro tampoco nos quieren indemnizar, a mi no me quieren reconocer los 3 años que estuve como regidor, entonces por 5 años de servicio me ofrecen 40 mil pesos los cuales no voy a aceptar porque no alcanzan ni para pagarle al abogado».
A nombre de los 25 corridos por segunda ocasión, el suegro de Mario Tapia -líder del Movimiento Territorial del PRI- dice estar dispuesto a esperar todo el tiempo necesario hasta que la Junta de Conciliación y Arbitraje emita el laudo definitivo que le permite volver a su empleo -de no hacer nada- en la alcaldía de Matamoros.
		




