Con su singular estilo y un disfraz de Santa Closs adaptado como cuera tamaulipeca, el señor Amaury Becerril recorre las calles de Matamoros caracterizado como Payaclos, un personaje ya imprescindible en la temporada navideña fronteriza.
Para este septuagenario dedicado a la colecta de cartón, se trata de una buena época, considerando que el agradable clima y la alegría con la que los niños de Matamoros reciben los dulces y canciones que reparte sin esperar nada a cambio.
Se trata de una tradición arraigada ya desde hace 3 años, y que lleva a Payaclos a las colonias de la periferia a repartir dulces que previamente recolecto a partir de donativos de particulares.
«Primero me ayudaron algunos políticos como Belen Rosales, Juan Patiño y Davids Morales entre otros, pero luego empezaron a esconderse y en los dos años últimos se ha podido hacer por la cooperación de personas desinteresadas que dan dulces ya que no acepto dinero en efectivo».
Con su triciclo equipado como trineo, incluyendo a Rodolfo el Reno y una piñata de Santa Closs, don Amaury se prepara para entregar 300 bolsitas de dulces antes de la nochebuena, en un esfuerzo físico que se ve recompensado con la sonrisa de los niños de Matamoros.






