Una fuga de gas natural descubierta en el ejido La Vanguardia puso en evidencia el abandono de Petróleos Mexicano, PEMEX, hacia sus instalaciones en la zona rural de Matamoros y como de forma negligente expone la vida de los campesinos y sus familias.
Fue la tromba del miércoles la que descubrió la fuga de gas en el ducto ubicado a espaldas de ese ejido de la carretera Sendero Nacional, denunció el comisariado José Antonio Pérez Hernández.
«Si no es porque llueve y se inunda, no nos damos cuenta que hay fuga, lo que pasa es que en medio del charco se hacían burbujitas y eso le llamo la atención a los vecinos que pidieron ayuda, sino ahi estaria todavia el gas escapando y el peligro de que esto explotara en cualquier momento».
A nombre de las cien familias que vivieron largas horas de miedo y zozobra por la fuga y que además para ponerse a salvo de una posible explosión tuvieron que abandonar sus casas, el entrevistado pidió de frente a los técnicos e ingenieros el dar mantenimiento de forma permanente a los ductos y no tener que esperar a que huela a gas o llueva para descubrir una fuga.
«La verdad es que con estos ductos aquí estamos muy expuestos, los 350 que vivimos aquí en La Vanguardia, pero también de otros ejidos más adelante que pudieran estar en la misma situación y no saberlo».
Corporaciones como Protección Civil, la Policìa Federal Preventiva y la Secretaria de la Defensa Nacional acudieron al lugar de la fuga y ordenaron el desalojo de 100 familias en las 15 horas que PEMEX tardó en reparar el daño.
