TV AZTECA.- Anoche acabamos el día con la triste noticia del fallecimiento deMuhammad Ali. Decir que fue el más grande atleta de todos
los tiempos es poca cosa, Ali fue mucho más allá. Cambió la historia de su mundo transformándose a sí mismo, se creó un personaje legendario capaz de hablar sin parar pero con coherencia.
Nació el 17 de enero de 1942 como Cassius Marcellus Clay JR y cambió su nombre cuando se convirtió al Islam de la mano deMalcolm X, aludiendo que ese nombre era un nombre de esclavo, y si, en alguna época se acostumbró que los esclavos pusieran a sus hijos los nombres de sus amos como gratitud por «el buen trato recibido», así bautizó su abuelo a su padre y su padre a él, aprovechando la presencia de la televisión Ali se bautizó a sí mismo y estremeció al mundo un día después de vencer a Sony Liston.
Muhammad Ali lo ganó todo en su época, se negó a ir a la guerra, el gobierno retiró su pasaporte, sufrió de racismo en su propia tierra y enseño a los de su raza a ir por la vida con la frente en alto en una época en que se les obligaba a esconderse, trabajando de noche donde nadie los viera.
Personalmente, hace cuatro años comenzamos, trabajando en Box Azteca, una travesía de encontrar un vínculo con su historia, queríamos llegar a este momento inevitable en el que decimos adiós con una mayor cercanía a esta gran figura, pues precedió a varias de nuestras generaciones, quiero pensar que conseguimos eso y mucho más.
