Por Juan Hernández
El levantarse todos los días a las 3 y media de la mañana para estar listo y a las 4 am empezar a barrer las banquetas de algunos de sus vecinos en la colonia Sección 16 es más que un trabajo una bendición para el señor Lorenzo Pérez pues vive solo y se sostiene con lo que lo apoyan los vecinos.
Armado de su escoba sus guantes, su carretilla y su pala para cuando la tierra está muy pegada, don Lorenzo inicia sus labores de barrida de banquetas y camellones por la calle Justo Sierra desde la Francisco Vaca hasta la Ponciano Arriaga.
“Aquí barro desde muy temprano y la gente me ayuda a veces de dan cien pesos a la semana otros me dan 50 y asi voy juntando, con esto me sostengo pues vivo solo y el trabajo me mantiene sano, Gracias a Dios casi no me enfermo, ya voy a cumplir 63 años”, dice el entrevistado.
Otra de sus herramientas es su chaleco con rayas fosforescentes no sale sin el, pues argumenta que ya una vez una pesera se llevó de encuentro su carretilla con la pala al subirse a la banqueta y destrozar un poste por manejar sin precaución y a exceso de velocidad, finalizó don Lorenzo.
