Para las mujeres que piensan embarazarse es importante tener en cuenta su peso e índice de masa corporal antes de hacerlo, pues pueden afectar el contenido de la leche materna.
Con base en un estudio dirigido por la Universidad de Salud de Louisiana, el crecimiento infantil se ve directamente relacionado con la lactancia.

La leche que se produce en los primeros meses contiene proteínas proinflamatorioas, interlucina seis, insulina, leptina, antiinflamatorios, omega 3 y 6; así como ácidos grasos poliinsaturados.
“El contenido de la leche materna puede modificarse según el peso de la madre en el momento de la concepción y tiene un impacto adicional en el crecimiento y desarrollo de los bebés”, compartió Henry Nuss.
Un embarazo saludable también se puede lograr cuidando el peso de la madre.
Los investigadores compararon la relación de compuestos en la sangre y la leche materna con mujeres con un IMC normal y uno con obesidad antes del embarazo.
El hallazgo demostró que las cualidades proinflamatorias de la leche en esta etapa se relacionaron de forma inmediata con el crecimiento infantil.
“Los bebés que nacen de madres con peso poco saludable pueden ser programadas metabólicamente para tener una respuesta menos favorable a la leche materna”, detalló Nuss.





