El volcán Marapi, en la provincia indonesia de Sumatra Occidental, entró en erupción el domingo y expulsó nubes de ceniza blanca y gris a más de 3 mil metros (unos 9 mil 800 pies) de altitud y arrojó masas de ceniza caliente a varios kilómetros de distancia, poniendo en peligro a la población y turistas.
Durante las primeras horas no había reportes de víctimas, indicó Ahmad Rifandi, funcionario del Centro de Mitigación de Peligro Geológico y Vulcanología de Indonesia en el puesto de vigilancia de Marapi. Dos rutas para escaladores fueron cerradas después de la erupción y los vecinos recibieron instrucciones de mantenerse a 3 kilómetros de la boca del cráter y estar atentos al peligro de posibles erupciones de lava. Luego se informó de la muerte de 11 personas.
Unos 70 escaladores empezaron a subir el volcán de casi 2 mil 900 metrosel sábado y se quedaron varados. Hasta el momento, 49 han sido rescatados y el resto sigue esperando, dijo Hari Agustin, funcionario de la Agencia de Búsqueda y Rescate local en Padan, la capital de la provincia de Sumatra Occidental. En un video publicado en redes sociales, se ve cómo los escaladores son llevados a un albergue con sus rostros y cabello cubierto de polvo volcánico y lluvia.





