Mariana Cornejo
Comunicadora y fotógrafa del acontecer diario. Mamá de Isaac y Valentina.
Dejemos en claro que el bullying no es una moda, siempre a estado presente desde que nosotros eramos pequeños, pues quien no sufrió de burlas, rechazo y ofensas cuando estuvo en la escuela, a quién no le llamaron “gordinflón, esquelética, cuatro ojos, enano, jirafa, etcétera” los chicos lo gritaban a los cuatro vientos y las risas no paraban, lo que lo hace diferente de nuestros tiempos a la actualidad es que las burlas y ofensas subieron a niveles espantosos donde ya no son solo eso, ya son maltrato sicológico pues las hacen públicas por medio de las redes sociales, publican fotos y videos con contenidos muy comprometedores y un vocabulario no apto para los chicos de su edad, donde cualquier persona de cualquier lugar puede verlas y no solo eso, sino también pueden comentar y compartir la publicación, haciendo mas grande el problema.
Ya no son solo apodos incomodos y risas silenciosas como cuando nosotros estábamos en la escuela, ahora no es suficiente eso, ahora tristemente maltratan no solo emocional sino físicamente también a nuestros hijos, dejando marcar en su piel y su corazón, algunas se borrarán y otras serán muy difíciles de olvidar, pues ya esta cobrando la vida de niños inocentes.
A donde vamos con todo esto? Quién será el responsable?
No gastemos tiempo en buscar culpables, porque encontraremos muchísimos, como madres no queremos que nuestros hijos padezcan lo que algunos creen que es una moda esto del “Bullying”, no lo es ya quedó claro, mejor agotemos nuestras energías buscando soluciones y llevandolas acabo. Inculquemos a nuestros hijos el respeto, pero no solo para que respete a los adultos, sino a cualquier ser vivo, eso es vital mamás que leen este espacio, el respeto es la base de todo, hay que enseñarles y predicar con el ejemplo el respeto siempre, para cuando nuestros hijos estén en la escuela, en alguna reunión o cualquier lugar, ellos lo lleven a la practica, el respeto no es solo un valor mas que enseñar a nuestros críos, es de los mas importantes; el respeto a su persona, a su familia, amigos, desconocidos y el resto del mundo, incluyendo la naturaleza y animales.
La primera educación viene de la casa, la segunda de la escuela y la tercera de la calle.
Esta frase tiene mucha razón; cuando un niño le levanta la voz a un adulto, lo primero que dice “el metiche” es: “eso te enseñan en la escuela? A faltarle al respeto a la gente…” No mamás, eso no lo enseñan en la escuela, lo debemos nosotros de inculcar en la casa; en la escuela, a los maestros les dan un programa educativo donde lo que aprenderán nuestros hijos, será a leer, escribir, sumar, restar, etcétera; que gracias a algunos maestros ejemplares y dedicados les ayudan a nuestros hijos a reforzar los valores morales y éticos, eso es diferente, pero no es responsabilidad de los profesores enseñar lo que le dan en la escuela y a parte hacer el trabajo que como madres nos toca y todo esto en 5 horas, no es justo. Si bien es cierto y hay que recalcarlo que es responsabilidad de los maestros mantener el orden y la cordura de los niños en la escuela, es también gran parte de responsabilidad en nosotras como madres enseñarle a nuestros hijos como comportarse en la escuela y en todo lugar.
Porque a falta de la educación de la casa, entra la de la escuela o la de la calle, y si la última es mas fuerte que las dos primeras, corremos el riesgo de perder a nuestros hijos en cualquier momento.
No tenemos instructivo para educar a nuestros hijos, pero tenemos ejemplos valiosos a nuestro alrededor, veamos a los hijos de parientes, amigos y desconocidos, como son ellos, que les falta y que les sobra en su educación, para reforzarla con los hijos de nosotros, para que no terminen igual que ellos. Pedir ayuda tampoco está de mas, si no es de un familiar confiable puede ser profesional, o ambas, el objetivo es que nuestros hijos no se pierdan en un camino donde después no encontrarán salida.
En la  actualidad, donde la tecnología avanza mas rápido que nosotros, debemos de ser mas persistentes como madres, no dejemos a la deriva a nuestros hijos, no seamos del pensamiento que en la escuela aprenden todo, no pensemos que es una etapa y que se les pasará cuando crezcan; conocemos muchos casos de que por pensar así sus madres, hoy son personas groseras, peligrosas, que no generan ningún tipo de confianza.
El problema no es la tecnología, no es la escuela, no es el entorno; es falta de educación, de valores y sobre todo del tiempo que nosotros damos a nuestros hijos, ellos no lo aprenderán en unas horas, mucho menos al mencionarselos una sola vez, es de todos los días, a cada rato, en cada situación que se presente.
Ser madre, es muy difícil, no hay escuela para serlo y mucho menos tenemos instructivo que saquemos de un cajón, es una profesión que estudiamos y practicamos a la vez, en nuestra graduación como madres no nos entregarán un pergamino, nuestro reconocimiento bueno o malo, será el que nosotras mismas veamos reflejado en nuestros hijos.
Enseñemos también a nuestros hijos a ser fuertes, no solo físicamente, si no de mente, hay que decirles que se defiendan, que no permitan que los ofendan y mucho menos que los maltraten físicamente, en caso de no poder con la situación pidan ayuda, que no se queden callados, que entiendan que callar no mejora el problema, que mantengan la comunicación y sobre todo la confianza con nosotras.
El “bullying” no es mas que la falta de compromiso de muchos padres de no hacerse responsables de educar a sus hijos, falta de valores que no enseñan en la casa y quieren que en la escuela los eduquen.
Está en nosotros que esto termine, y si queremos que acabe, empecemos a educarlos hoy, AHORA.
		



