Hace dos meses, el ex alcalde Alfonso Sánchez Garza me lo dijo en lo cortito: reubicar las fuentes danzarinas, emblemáticas de la administración que punteó hasta el pasado septiembre, esas que aventaban chorros de agua multicolor -por el efecto de luces y tecnología de punta-, tendría un costo aproximado de 4 millones de pesos.
«No es nada más quitar por quitar, van a tener que sacar todo el sistema de tubos y ductos que ya no van a funcionar, entonces a comprar nuevos, y en donde quiera que las pongan también van a tener que construir un cuarto de bombas para que puedan funcionar, entonces todo eso yo calculo que costará unos 4 millones de pesos, casi como hacerlas otra vez».
Apenas podía ocultar su amargura, el hecho de que una de las obras cumbres de su gobierno estaba por ser eliminada de la plaza principal de Matamoros le dejaba un mal sabor de boca al priísta, que hoy goza de un retiro político obligado por dos malos resultados en las elecciones del 2012 y 2013 pero  se reactiva como pujante empresario constructor en Jalisco.
Lo que hace dos meses era un rumor, en estos días se confirma, las fuentes danzarinas, inauguradas el 30 de abril del 2013 y cuyo costo oficial alcanzó los 6 millones y medio de pesos, no llegaran al año de vida, con desdén el gobierno que encabeza la panista Norma Leticia Salazar Vázquez se prepara para el destierro que estará a cargo de la Secretaría de Desarrollo Urbano a un lugar todavía por definir.
Fundamento para quitarlas hay: José Luis de la Garza, titular de esa dependencia municipal, reveló que las fuentes danzarinas no pueden seguir en la Plaza porque están en una zona prohibida, porque no sacaron los permisos correspondientes y porque además estorban para los honores y otras ceremonias cívicas.
Pero si bien voluntad para eliminar las fuentes sobra en Presidencia Municipal, lo que puede escasear son los recursos económicos para costear esos 4 millones de pesos calculados por su creador.
Apenas la semana pasada conocíamos de la solicitud de un préstamo de más de 7 millones de pesos para indemnizar a un primer grupo de policías, y hoy en sesión de cabildo se estableció la necesidad de atraer más dinero a las arcas municipales con la condonación de recargos y gastos de ejecución del impuesto predial. Esa medida que tradicionalmente se anuncio en el último trimestre del año fue aprobada por el cabildo para atraer a los morosos y su dinero a las cajas municipales.
En medio de tal entuerto, le corresponde a Leticia no equivocarse como lo hizo su antecesor Alfonso, que más allá de su entorno familiar no pregunto a nadie sobre la factibilidad de las fuentes millonarias y tampoco fue escrupuloso en el tema de los dineros pues es fecha que no sabe con qué recursos se financiaron.
Si su objetivo es transformar a Matamoros, ahora la alcaldesa Salazar, más allá de quitar por quitar, y eliminar de su cercanía todo tufo priísta-alfonsista, esta ante la oportunidad histórica de involucrar a la población y a través de una consulta pública definir el nuevo hogar de las fuentes danzarinas.
Con una acción así, Leticia haría sentir a los ciudadanos que son tomados en cuenta por su administración y además se vacunaría para que al no ser una decisión exclusivamente suya, en tres años a un nuevo huésped de la Presidencia Municipal no se le ocurra cambiar a las fuentes fugitivas de su nueva ubicación.
		




