¡Buenos días, estimado lector! agradeciendo los correos electrónicos recibidos sobre el tema: “Redes Sociales” que expusimos el viernes en el programa de radio “La mesa de la verdad”, lo retomo hoy.
¿Has escuchado de “FACEBOOK”?, sí, el lugar donde la gente te agrega como amigo sin conocerte o si te conoce te ignora cuando te ve en la calle, donde la mayoría efusivamente te desea Feliz cumpleaños (porque Facebook se lo recuerda), donde tus amigos y familia te bloquean. donde los mentirosos se creen sus mentiras, donde tus admiradores secretos y tus enemigos son los que más visitan tú perfil para “conocer” tú vida, que has hecho y que escribiste para comentarlo a los demás. Donde otros creen que tú estado va dirigido a ellos. Donde escribes lo que realmente piensas y siempre hay alguien que interpretará mal tus palabras.
De manera sencilla te explico; las redes sociales las conforman personas de todo el mundo con intereses y gustos similares, ya conocidas o que desean conocerse, sirven para interactuar, socializar, crear amistades, autoexpresarse, compartir información, apoyarse y hasta debatir a través de Internet. Las redes sociales son sitios atractivos sobre todo para los adolescentes y los adultos jóvenes y estas son administradas por los mismos usuarios.
La primera red social disponible en Internet fue una página llamada Classmates.com (que todavía existe), creada en 1995, en 2004 apareció la red más popular conocida como “Facebook” y posteriormente twitter en 2006.
Las redes sociales se conforman basadas en la teoría conocida como “Seis grados de separación” (publicada en 1967), que dice: Todas las personas se interrelacionan unas con otras, con un máximo de seis personas como intermediarios en una cadena. Por ejemplo: Tú lector, conoces a “alguien” que a su vez conoce a “otro” que a su vez conoce a “alguno” que conoce a tú hermano. Esto hace que el número de personas conocidas en la cadena crezca conforme el número de conexiones crece, resultando que
sólo se necesita un número pequeño de estas conexiones para formar una red en la que de una manera u otra todos estamos conectados.
En México, 42.4 millones de personas son usuarios de una computadora, 37.6% tienen acceso a Internet y el 6.9 millones de los hogares tienen una computadora con conexión a Internet, según el INEGI Instituto Nacional de Estadística y Geografía.
La edad de los usuarios que más usa Internet fluctúa entre los 12 y los 35 años, siendo el 79% de los usuarios que lo utiliza para diversión y “comunicarse” en redes sociales.
Los niños empiezan a involucrarse y bien dirigidos pueden desarrollar en estos entornos habilidades que serán básicos para su éxito profesional en el siglo XXI.
Cierto es, que las redes ofrecen beneficios sociales, formativos y oportunidades para crear, colaborar y construir aprendizaje, paradójicamente también ofrecen riesgos: a tu privacidad y a la de tú familia, robos de identidad, estafas, contenidos inapropiados, ciberbulling, grooming (acoso sexual a menores), imprudencias (como los comentarios de hijos de políticos que meten a sus padres en apuros) abuso, adicción e infidelidades.
¿Tú primera acción del día es entrar a Facebook o twitter?, ¿Puedes ignorar el deseo de entrar a tus redes durante un día?, ¡cuidado!, déjame decirte que las redes sociales son potencialmente más adictivas que el cigarro y el alcohol.
¿Que podemos hacer? ¡Todo, menos cerrar los ojos! debemos conocerlas, aprender a usarlas para acompañar, orientar y supervisar a los menores. Poner limites: definir y controlar el tiempo máximo, frecuencia del uso, el lugar. El control esta en tu decisión y voluntad.
¡Feliz Domingo otoñal!…esta historia continuara.
		




