BBC.-Cuando la policía le preguntó si había visto al hombre de la foto que le mostraban, Frank Freshwaters supo que ese era el final de sus 56 años huyendo.
Freshwaters, de 79 años, de barba blanca y cola de caballo gris, tenía delante el retrato de la ficha policial de un joven de 23 años que miraba desafiante a la cámara: su propia imagen.
«Dijo que no lo había visto en mucho tiempo», relata el mayor Tod Goodyear de la oficina del alguacil del condado de Brevard, en el centro de Florida.
«Luego básicamente lo reconoció y dijo: ‘Me tienes'».
Llevaban una semana vigilándolo. Aunque vivía como William Harlod Cox, los oficiales sabían perfectamente cuál era su verdadera identidad.





