EL PAÍS.-El Gobierno estadounidense pagó 20,2 millones de dólares (18 millones de euros al cambio actual) en prestaciones de la Seguridad Social a más de 130 residentes de Estados Unidos vinculados a las atrocidades nazis a lo largo de más de medio siglo, aunque algunos pagos se han hecho incluso en este mismo año, según una investigación federal.
El volumen del importe pagado, mucho mayor del que esperaban los funcionarios que llevan la investigación, da prueba de la facilidad con la que miles de exnazis lograron asentarse en una nueva vida en los Estados Unidos, sin apenas ningún control después del final de la Segunda Guerra Mundial .
Un informe que se publicará esta semana por el inspector general de la Administración de la Seguridad Social concluye que la práctica totalidad de los pagos se han realizado adecuadamente bajo la ley de cada momento, y que los funcionarios federales no tenían la autoridad legal para prohibir esos beneficios hasta que el nazi sospechoso fuera deportado, según funcionarios consignados en el informe citados por Bloomberg.





