Un estudiante de primaria en Río Bravo se quedo con las ganas de recibir la bendición, luego de que el sacerdote se la negara por no tener mochila nueva.
El niño que llego con toda la ilusión a la parroquia de San Juan de Los Lagos se quedo al margen de la bendición grupal que dio el párroco José Luis Cerra Luna.
Provisto de cuaderno y pluma, el chamaco se acerco cuando empezaron a aventar el agua bendita, pero el personal de la iglesia le dijo que se quitara porque la bendición era solamente para los que llevaban mochila nueva.
Cabizbajo el niño se fue a las bancas y desde ahí observo como otros niñas y niños festejaban las bendición de sus mochilas para tener un inicio exitoso del ciclo escolar 2017-2018.
Como era de esperarse al niño tampoco se le permitió tomarse la foto grupal al termino de la misa.