Una madre salvadoreña y su esposo británico recuperaron a su bebé de cuatro meses, intercambiado al nacer, luego de una lucha desesperada ante la justicia del país centroamericano.
Mercedes Casanellas y su esposo Richard Cushworth, ambos misioneros en El Salvador, siempre habían sospechado que el bebé que llevaron a casa tras el parto en una clínica privada en la capital salvadoreña no era su hijo biológico.
Luego del regreso de la pareja a su hogar en Estados Unidos, una prueba de ADN confirmó las sospechas de que el niño, al que llamaron Jacob, no era hijo biológico del matrimonio.
Los padres regresaron a El Salvador y acudieron al hospital privado donde tuvo lugar el parto, el Hospital Ginecológico, para determinar en primer lugar si el bebé había sido cambiado por error, algo que negó el centro médico.
La pareja decidió entonces interponer un recurso ante la Fiscalía General de la República y denunciar el caso públicamente.
El médico que atendió el parto, Alejandro Guidos, fue arrestado como parte de la investigación, mientras los padres expresaron temores de que el intercambio fuera parte de las acciones de una red de tráfico de niños.
En una emotiva audiencia la semana pasada, la madre confrontó a Guidos, exigiéndole que dijera la verdad sobre el paradero del niño.
Finalmente, en otra audiencia a puertas cerradas en la sede de la Fiscalía General de la República, los bebés intercambiados en el Hospital Ginecológico fueron entregados a sus verdaderas familias a las 10 de la noche, hora local, del lunes, según informes en la prensa salvadoreña.





