El Pleno del Congreso de la Ciudad de México aprobó este martes que las corridas de toros se lleven a cabo sin violencia, en una histórica jornada que desató protestas de asociaciones animalistas y promotores de la tauromaquia.
Dicha iniciatva, propuesta por la jefa de Gobierno capitalino, Clara Brugada, fue aprobada con 61 votos a favor y uno en contra, la cual regulará la tauromaquia en la capital para no lastimar al animal ni al torero.
El documento tuvo algunas modificaciones para que el tiempo máximo de actuación para cada toro o novillo en el nuevo espectáculo taurino sea de 15 minutos y no de 10, como venía en la propuesta original de Brugada Molina.
Quedó apuntado que al finalizar la corrida, el toro o novillo deberá ser devuelto a la ganadería o a su propietario.





