En Matamoros, luego de la euforia inicial por la puesta en marcha de 20 camiones recolectores de basura, sobrevino en lo habitantes de las colonias populares la desilusión al ver que las unidades nuevas no llegan hasta las afueras de sus viviendas, por lo que el gusanero y mosquero continúan i
gual o peor que antes.
Como responsable inmediato de tal falla en la administración recién comenzada de Jesús de la Garza Díaz del Guante, aparece su Director de Servicios Públicos Primarios, el puesto que le inventaron a Humberto Zolezzi Carvajal, Beto Jr., que comienza así con el pie izquierdo su 
desempeño como servidor publico.
Aunque Humberto, se paro el cuello la madrugada del uno de octubre y aseguro en el discurso leído frente a la alcaldía de Matamoros, que esos 20 camiones habrían de llegar a 450 colonias y 48 ejidos de Matamoros, lo cierto es que en las calles siguen llenas de basura.
No es la primera vez de Beto Jr., dentro de la política, antes participo como regidor del Ayuntamiento en el trienio de Alfonso Sánchez Garza y de ahí salto a la gerencia de Planeación y Relaciones I
nternacionales de la Lotería Nacional por obra y gracia de su madrina, Maria Esther Scherman, esposa de su padrino y eterno aspirante al Gobierno de Tamaulipas, Marco Antonio Bernal.
Beto Jr., es hijo de Humberto Zolezzi García,q uien fuera Subsecretario General de Gobierno durante el sexenio de Tomás Yarrington Ruvalcaba, y sobrino de Mario Praxedis, de los mismos apellidos, quien fue alcalde de Matamoros y trascendio por quedarse dormido durante las sesiones de cabildo.
La inexperiencia de Beto Jr., le puede salir cara a la floreciente administración de Jesús de la Garza, que prometio acciones inmediatas en la recolección de basura y le ha quedado a deber a la población en estos primeros días del gobierno priísta.
