SIN EMBARGO.- Aunque la reducción del trabajo informal ha sido uno de los objetivos principales de los gobiernos de México, la realidad es que pocos avances han logrado. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) expuso que en 2015 el 57 por ciento de los trabajadores mexicanos –cerca de 30 millones de personas catalogadas dentro de la Población Económicamente Activa (PEA)– se empleó en la economía informal, ese modo de empleo que excluye a los trabajadores de la estructura del desarrollo social.

Un estudio reciente de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) resaltó un factor poco tomado en cuenta, que es el estado de ánimo de las personas de América Latina, sobre todo jóvenes, que no logran conseguir un empleo formal y que se ven forzados a optar por un empleo en el que son más comunes los bajos salarios, la inestabilidad laboral, precarias condiciones de trabajo, carencia de coberturas asociadas a la seguridad social y ausencia de representación y diálogo social.
La OIT ubica a los trabajadores informales como un grupo vulnerable y con severas limitaciones para el desarrollo personal y familiar. Añade que los efectos de la economía informal se perpetúan a lo largo de la vida laboral, por lo que su situación económica tanto actual como futura es incierta. Sus ingresos son variables, labora jornadas extensas y no tiene acceso a seguridad social; si se enferma o sufre un accidente, tendrá dificultades en el acceso a atención médica u otras prestaciones. Tampoco puede aspirar a una pensión al llegar a la vejez.
En América Latina hay alrededor de 130 millones de personas sin derechos laborales, de acuerdo con la OIT y en México son 30 millones de personas, según los datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). En los últimos tres años la tendencia de que más de la mitad de los mexicanos trabajen en la informalidad se ha mantenido. De 2012 a 2015 la tasa de informalidad ha estado entre el 60 y 58 por ciento de la población ocupada. En febrero de 2016 se ubicó en el 57.7 por ciento.