Lo que era solo una esperanza guardada en el corazón de un humilde pescador, va tomando forma para convertirse en una realidad: la aparición de su hija secuestrada hace 13 años en la Playa Bagdad de Matamoros.
Ebarseín Miranda toma aire y recuerda como la noche del viernes en un refugio de Tijuana tuvo enfrente a la mujer morena y delgada en la que reconoció a su hija Concepción, Conchita, secuestrada en febrero del 2007 en los campos pesqueros del balneario. 
«Si es mi hija, lo siento en mi corazón, solo falta que el ADN le confirme».
Trece años y muchos kilómetros después, en Tijuana la otra esquina del país, espera los resultados de las pruebas de sangre para demostrar científicamente lo que su corazón le dijo ej junio,cuando encontró en facebook la foto de una indigente tirada en la calle, perdida en las drogas: que era su querida hija Conchita.
El proceso esta a cargo de la Fiscalía General de Justicia de Baja California que le pide la prueba de ADN para que pueda traerse a Tamaulipas a la joven que ahora tiene 21 años.
Concepcion Miranda fue robada en febrero del 2007 en la Playa Bagdad de Matamoros y 13 años después una publicación en redes sociales permitió a su padre reconocerla en un indigente tirada en las calles de Tijuana.
La lucha del pescador continúa en el terreno legal para poder regresar con su hija pues esta obligado a demostrar a las autoridades que es la misma niña que desapareció en Matamoros.
