UNIVISION.- Más de un millón de habitantes de bajos ingresos en 21 estados podrían perder próximamente la prestación de los cupones de alimentos que les extiende el gobierno si incumplen el requisito laboral introducido este mes.
El cambio de normativa en el federal Programa Asistencial de Nutrición Suplementaria se debió a una mejora de la economía, específicamente a una baja en el desempleo.
Sin embargo, la medida ha aumentado las preocupaciones entre los pobres, así como entre los proveedores de servicios sociales y empleados de bancos de alimentos, que temen una oleada de personas hambrientas.
Las experiencias recientes en otros estados indican que la mayoría de los más afectados posiblemente no cumplirán el requisito laboral y les será suspendida la entrega de los cupones para alimentos.
Para muchas personas, «significa menos comida, menos nutrición adecuada. Y con el tiempo, la situación puede tener repercusiones de salud y en el sistema de atención sanitaria», dijo Dave Krepcho, presidente y director ejecutivo de la organización caritativa privada Second Harvest Food Bank of Central Florida, que distribuye alimentos donados.