PLAYGROUND.- El pasado mes de marzo Mario Perivoitos, de 41 años, falleció en Londres tras ser atacado por su perro mientras un equipo de la BBC estaba en su casa rodando Drugs Map of Britain, un documental sobre las drogas en el Reino Unido.
Ahora se ha hecho público que el animal, un Staffordshire bull terrier llamado Major, tenía cocaína crack y morfina en su sistema cuando tuvo lugar el ataque . Nicholas Carmichael, toxicólogo veterinario, encontró niveles elevados de ambas sustancias en la orina del perro.
Se cree que el perro tomó por error parte de las drogas de Perivoirtos, politoxicómano, y las sustancias propiciaron el incidente. «Es muy posible que el perro hubiera consumido drogas, probablemente las comió. Es casi imposible decir si eso hizo que el perro atacara, pero sí les hace actuar de manera anormal», dijo Carmichael.
El perro tenía ocho veces el nivel legal de drogas para conducir.
«El perro tenía ocho veces el nivel legal de drogas para conducir. Claramente las había tomado, bien ingeridas o inhalando el humo, y es más que probable que fuera un factor importante en el comportamiento del perro», aclaró.
Andrew Walker, el juez de instrucción del caso, está de acuerdo con Carmichael. «Es probable que el perro hubiera consumido cocaína comiéndola y es probable que esto fuera un factor añadido en el comportamiento del perro», dijo.
El ataque tuvo lugar poco después de las diez de la noche. Sobre esa hora Perivoitos llegó a casa después de haber estado consumiendo cocaína. Empezó a encontrarse mal y se tumbó en la cama, donde empezó a sufrir un ataque epiléptico. Fue en ese momento cuando Major lo atacó. Según Walken, las convulsiones que sufría en ese momento el fallecido provocaron que el perro, en un estado completamente alterado por el crack que había ingerido, sintiese el impulso de atacar.