ARISTEGUI.- Bruno Fernandes de Souza, quien fue condenado por ordenar el asesinato de su novia, regresará a las canchas luego de firmar un contrato con el club brasileño de segunda división Boa Esporte.
Fernandes apenas había cumplido 7 de los 22 años de la condena por el crimen cuando fue liberado el mes pasado y ahora su contratación ha sido criticada por grupos contra la violencia de género, así como por la familia de la víctima.
En 2010, Eliza Samudio fue reportada como desaparecida, luego de presentar una demanda por manutención del hijo que tenía con Fernandes. La acción legal en su contra ponía en peligro la transferencia del jugador a un equipo en Milán.
El portero confesó haber ordenado el homicidio de su pareja sentimental, quien fue torturada y ahorcada por unos amigos del jugador. Luego de matarla, los asesinos alimentaron a los perros de Fernandes con el cuerpo de la mujer.
Tras el asesinato, Fernandes y los homicidas brindaron juntos y festejaron.
Pero el club deportivo considera que Fernandes ya cumplió su deuda con la ley brasileña. En un comunicado, Boa Esporte aseguró que ayudarían a la reintegración social del portero al darle “la dignidad del trabajo”.
Algunos aficionados están en desacuerdo con esta decisión y planean una manifestación afuera del estadio del equipo.