La vacuna del laboratorio estadounidense Pfizer y el alemán BioNTech fue testada durante su tercera fase en Brasil, y varios países, entre ellos Reino Unido, Estados Unidos y México
El presidente Jair Bolsonaro cuestionó los posibles efectos colaterales de las vacunas contra el coronavirus y tomó como ejemplo la de Pfizer/BioNtech, diciendo que no hay ninguna garantía de que no convierta a quien se la aplique «en un caimán».
En el contrato de Pfizer está bien claro: ‘no nos hacemos responsables por cualquier efecto colateral’. Si te vuelves un caimán, es tu problema», dijo Bolsonaro, que ha cuestionado en diversas ocasiones los inmunizantes así como la gravedad de la pandemia que ya dejó casi 185 mil muertos en Brasil.
La vacuna del laboratorio estadounidense Pfizer y el alemán BioNTech fue testada durante su tercera fase en Brasil, y varios países, entre ellos Reino Unido, Estados Unidos y México, han empezado sus campañas de vacunación con ella o le han dado luz verde.
Sin embargo, el presidente brasileño tiene dudas sobre su eficacia.





