ARISTEGUI.- Cultura, gastronomía, sol y playa, viajes de exploración y acercamientos con la naturaleza, son los principales atractivos para la comunidad Lésbico, Gay, Bisexual, Transexual, Transgénero, Travesti e Intersexual (LGBTTTI), que ha demostrado ser un mercado exigente que gusta del buen vivir y que está dispuesto a pagar incluso el doble que un viajero heterosexual.
Ciudad de México, Jalisco, Oaxaca, Morelos, Guerrero y Quintana Roo, son algunas entidades que han sabido ver las ventajas de estos turistas y han emprendido una capacitación a sus proveedores de servicios, que les permita ofrecer la mejor atención a este sector, para que se sienta en libertad y comodidad.
“La idea es estar preparados para recibir al segmento, para que identifiquen cuál es la oferta complementaria, que se generen cadenas de valor y redes de proveedores, de tal manera que cuando los flujos de visitantes empiecen a llegar de manera más dinámica, los destinos estén listos para darle la atención de calidad internacional que requieren”, señaló el director general adjunto de Innovación del Producto Turístico de la Secretaría de Turismo, Alfonso Bayón.
Dijo que hasta el momento se ha instruido a nueve destinos del país, los cuales están preparados para atender a este segmento, en muchos casos por miembros de la propia comunidad LGBTTTI.
“Por lo que es más fácil en algunos destinos brindar la atención que requiere este segmento de alto gasto, que gusta de la cultura, buenos espectáculos, la gastronomía y las compras de alto nivel, por lo que deja una alta derrama económica”, detalló.
Este alto gasto, explicó, se debe a que las parejas de este mercado pertenecen a la denominación “Double Income, No Kids” (doble sueldo, no niños), lo que les permite usar su dinero en esparcimiento y viajes.