En la ruina total, sin comer y cubierto de gusanos, fue como el señor Enrique Reyes Barroso fue descubierto en una vecindad del barrio La Capilla por trabajadores sociales del DIF Matamoros.
Desnudo y expuesto, postrado en cama, sin fuerzas para levantarse, con costras y excreme
nto pegado a la piel, el hombre de 70 años esta pensionado por el Instituto Mexicano del Seguro Social y recibe cada mes 4 mil pesos por mes, mismos que le son arrebatados por habitantes de la vecindad ubicada en la 12 e Independencia.
Y es que aprovechado que José Luis Reyna, «El Choco», sobrino del anciano, había ingresado a rehabilitación por su adición a la droga, las vecinas de la calle Independencia lo despojaron de su pensión y lo dejaron sin comer por lo que presentaba un alto grado de desnutrición.
En condiciones infrahumanas, rodeado de suciedad, don Enrique paso la última semana sin comer y solo este lunes con la visita del personal del DIF y al ver que su sobrino salió de rehabilitación recupero la tranquilidad.
Las investigaciones por parte del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia continúan y no se descarta emprender acción legal contra las vecinas de La Capilla.





