Juan y Andrés, mejor conocidos como los mejores amigos del mundo, además de ser primos hermanos (“primos primos” dijéramos en mi tierra, por ser hijos de hermanas), siempre estaban juntos, sin embargo en estos días la familia había notado un distanciamiento, confirmándose en la reunión familiar del viernes, el tema alrededor del asador giraba precisamente de candidatos y tiempos electorales, ahí se supo que Andrés invito a Juan a un acto proselitista y estando ahí Juan en broma le dijo: “el aspirante tiene cara de “pillo simpático” ojala no lo elijan como candidato, pero Andrés se sintió y se molestó, la amistad ya no fue la misma. Ahora más bien parecen “primos conocidos”.
¡Buen día estimado lector! Sin duda lo mejor que existe en nuestras vidas son la familia y los amigos, con ambos compartimos intereses personales y nos apoyamos para seguir adelante. Sin embargo, a veces durante el transcurso de los procesos electorales sucede que familias y hasta sólidas amistades se fracturan al no coincidir con las mismas ideologías, preferencias electorales, o bien al evitar asistir o acompañar a eventos proselitistas de partidos simpatizantes.
Al igual que en los juegos y finales de fútbol, en tiempos y campañas electorales algunas personas se apasionan. ¿Cuantos conocemos historias de familias o amigos que se han distanciado afectivamente, durante el transcurso de las campañas electorales?, ¿Cuantos conocidos o familiares han llegado incluso a los insultos y hasta los golpes por no coincidir con las mismas ideologías políticas o al bromear porque tal o cual candidat@ va puntos abajo?
En tiempos electorales, a luces demostramos inmadurez política, cuando emitimos “comentarios escuchados de oídas”, (la mayoría de las veces “calumnias tempo-electoreras”) intentando descalificar a los partidos o candidat@s contrarios, sin caer en cuenta que quién se descalifica es uno mismo y por consecuencia los comentarios rebotan dañando a nuestra comunidad.
Evitemos pues estimados lectores apasionarnos durante estos días, escapemos de lastimar a seres queridos y amigos con burlas, agravios y ofensas sólo por no compartir las mismas filosofías, ideologías, partidos o candidat@s. En tiempos electorales el que no se apasiona podrá darse cuenta: que el necio no sabe razonar y el fanático o que vive del partido menos razonará.
Matamoros, vive tiempos electorales bajo campañas políticas (o más bien parecen campañas de desprestigio entre los partidos contendientes, lo más curioso es que muchas veces estas acusaciones las hacen conocidos líderes que olvidan que para tener la lengua larga no deben tener ni tantita cola.) y actos proselitistas, como cabezas de familia hagamos hincapié en respetar opiniones y fortalecer la unión y la convivencia al reunirnos con nuestra familia y amigos, respetemos a plenitud la libertad de sus opiniones.
Recordemos sobretodo a los más jóvenes que tanto las redes familiares como la de los buenos amigos están tejidas con lazos de sangre y amor, tejidas para durar por siempre y no fracturarse en tiempos de campaña.
Todos queremos un mejor Matamoros y según los candidat@s se postularon por su “Amor a Matamoros”, seria excelente que hoy y siempre, bajo el respeto y respaldo de cada partido e ideología, l@s candidat@ fueran ejemplo para familias y redes de amigos siendo los primeros en evitar caer en criticas y difamaciones de unos a otros (más unos que otros), los primeros en ahuyentar envidias y conflictos dentro del mismo equipo. Siendo los primeros en concentrar todo ese amor y ganas de trabajar por Matamoros y nosotros los matamorenses, buscando el acercamiento y el dialogo sincero con los ciudadanos, que al final somos los que decidiremos y haremos los cambios de manera inteligente, libre y secreta, eligiendo a “aquellos candidat@s que creemos son los mejores individuos para representarnos con inteligencia, honestidad y trabajo.
Vía redes sociales recibí un mensaje, también de un candidato, creo es el mejor candidato: “¿Estarán próximas las elecciones de su Fe y su Corazón?, deseo postularme” Atte. Dios. ¡Vote por El! ¡Feliz Día!





