El grupo de amigas de los miércoles es un grupo especial, el cual disfruto mucho, platicamos de todo… menos de política (de política platico con las de los martes). El tema relevante de este miércoles fue: ¿Qué le pasó al “Piojo”? hubo varias opiniones, entre ellas: “Es que es un líder”, sí, estoy de acuerdo, Miguel Herrera “el Piojo” es un líder con muy poco control de sus emociones, desde el inicio de su carrera como jugador ha demostrado su falta de madurez e inteligencia emocional.
Y como se lee en varios portales, durante los últimos meses del 2014 y lo que va de este año los medios de comunicación inflaron su ego al colocarlo como el líder del momento, constantemente aparecía en “selfies” con políticos, personalidades y jugadores estrellas o en comerciales. Aunque no soy fan del América, reconozco que “El Piojo” lo devolvió a los primeros lugares, luego lo llamaron a dirigir la Selección Mexicana para concretar el anhelo de la mayoría de los mexicanos, el pase al Mundial de Brasil. Ya en el Mundial les dio esperanzas a los aficionados al fútbol: Triunfó ante Camerún, ante Croacia y empato sin goles ante Brasil. Con Holanda, recuerdo que nos devolvió la euforia hasta que en los últimos minutos está se esfumo en una frase que se volvió una máxima en las redes sociales: “NoEraPenal”.
Recuerdo que en años anteriores si la selección y su técnico no llegaban al quinto partido eran más que censurados, esta vez hubo un común acuerdo entre los directivos de los equipos para que el ‘Piojo’ se quedara al mando de la selección nacional, trabajando en los primeros objetivos: Copa América y Copa de Oro 2015, con miras hacia Rusia 2018.
Sin embargo han sido en los torneos de estas dos copas en las que hemos visto un “Piojo” carente de inteligencia y madurez emocional, su imagen y su liderazgo cayeron estrepitosamente, y muchos preguntan: ¿que le paso a “El Piojo Herrera”?.
Difícil es tratar de hacer un perfil psicológico si solo conocemos lo que la televisión nos muestra, sin embargo la experiencia nos permite hacer una apreciación de su personalidad a través de su conducta y sus acciones diarias, bueno las más conocidas, las que destacan los diferentes medios de comunicación, como
fue su ultima acción ejercida contra el comentarista Christian Martinoli, al darle un golpe en la nuca, siendo este acto la gota que derramo el vaso, provocándole su cese como director técnico de la Selección Mexicana.
El perfil de “El piojo” desde sus inicios deportivos se define impulsivo, es un líder carente de madurez emocional que actúa sin pensar las consecuencias de sus actos, es un líder que puede manejar a una selección pero pierde el control de su inteligencia emocional, demostrado está que lo domina su impulsividad. Su irritabilidad ante un problema deportivo se hace presente y su tolerancia a la frustración se ausenta, reacciona negativamente ante comentarios de sus resultados, por lo tanto carece de autocrítica y mal manejo del estrés, con tendencia a culpar a los demás de sus acciones y… podría seguirle, pero pobre “Piojo”, es tan humano como todos nosotros y los humanos cometemos errores, no imagino lo que debe de estar sufriendo al haber sido separado de su cargo, de su pasión, el fútbol. De seguro que en este momento ya entendió que las emociones son grandes maestras que están ahí para mostrarnos algo que puede y debe cambiar en nuestra vida.
De esta experiencia deberíamos de aprender y realizar un análisis, ¿que tan bien manejamos nuestras emociones cuando se nos presenta algún problema? ¿Cómo la manejan nuestros hijos, nuestros alumnos o las personas que nos rodean?
Madurez e inteligencia emocional van de la mano, son“la capacidad interna para responder a la vida con sensibilidad, sabiduría, templanza, estabilidad y desapegos, aceptando con fortaleza la realidad de las circunstancias y su entorno, afrontándolas de una manera positiva. La madurez emocional no tiene nada que ver con la edad. Una persona inmadura emocionalmente pierde el control de sus emociones, reacciona impulsivamente ante las frustraciones o adversidades de la vida con acciones erróneas o negativas, incluso con deshonestidad y agresividad, tal cual le paso a “El Piojo”.
La teoría dice que respiremos profundo, contemos hasta 10 (si siente que no se calma sígale contando…o cántese la canción de Sabina “Y nos dieron las diez y las once, las doce”…y le
apuesto que le cambiara el humor). Ya, en serio, le comparto una técnica muy sencilla: El semáforo;
LUZ ROJA: Alto total, detenga su impulsividad, retírese del lugar, analice que pasó, dese un lapso y piense, piense, piense. esto le evitara más problemas.
LUZ AMARILLA: Cuidado, ¿Qué sensaciones experimenta su cuerpo? identifique sus emociones; Al expresar nuestros pensamientos las emociones se manifiestan en nuestro cuerpo. Podemos sentir un nudo en la garganta; presión en el pecho; taquicardia, presión baja o alta, dolor de cabeza, etc. Retírese a pensar en las consecuencias y probabilidades, es el momento de definir un plan y posibles soluciones y actuar para mejorar la situación que estemos viviendo.
LUZ VERDE: ¿Se siente emocionalmente estable? ¿Puede asumir su cuota de responsabilidad? ¡Adelante! ponga en práctica el plan que definió.
«Somos como un velero en medio del mar, el timón es nuestra razón, y nuestras velas junto con el viento son la pasión que nos impulsa. Si tenemos solamente el timón por más que lo movamos estaremos estancados en medio del mar, y si tuviéramos solamente velas, andaríamos sin rumbo a la deriva. Por este motivo, razón y pasión, cerebro y corazón, pensamientos y emociones, deben ir juntos y en equilibrio, porque nuestra Pasión da el impulso y nuestra Razón lo guía.» ¡Feliz Día!
Según el Dr. Travis Bradberry, autor del best seller “Inteligencia Emocional 2.0” “La importancia de que nuestro cerebro este conectado a nuestras emociones es para que ellas impulsen nuestro comportamiento. Entonces, las personas inteligentes emocionalmente son las que reconocen, entienden, dominan y controlan sus emociones”.





