“Juzgar a una persona, No define quien es ella, define quien eres Tu”
¡Hola mis queridísimos lectores! De nuevo los saludo con mucho gusto y sobre todo les deseo un verano muy divertido y como en esta época usualmente es cuando salimos más seguido a fiestas y reuniones; te pregunto si alguna vez has analizado ¿Qué clase de imagen das a los demás?, alguna vez has recibido algún comentario como (Yo creía que eras “muy serio” pero ahora que te conozco eres “muy buena onda”), incluso si manejas redes sociales sabes ¿qué tipo de persona proyectan tus fotografías o los temas sobre los que opinas?
Las personas a nuestro alrededor nos juzgan de cuatro modos distintos, Por lo que Hacemos, Por la Apariencia, Por lo que Decimos y Por como lo Decimos. A continuación te explico un poco y aunque el Juzgar no sea bueno, ni correcto, vivimos en una sociedad llena de estereotipos y opiniones que formamos y forman sobre nosotros.
* Por lo que Hacemos
Definitivamente nuestras actividades expresan mucho sobre nosotros, si eres deportista, participas en algún club de ayuda comunitaria, asistes a múltiples eventos. Incluso al momento de conocer a alguien y se presenta como médico, abogado o empresario inmediatamente asumes que es inteligente y una persona respetable; otro ejemplo podría ser al conocer a una persona que se dedique a realizar “Tatuajes”, algunos podrán interesarse pero la mayoría preferirán mantener su distancia, en algún tiempo se creía que solamente las personas que habían estado en la cárcel tenían tatuajes.
* Por la Apariencia
Desafortunadamente a diario somos bombardeados por diferentes medios sobre cómo debe lucir nuestro físico, nuestra vestimenta incluso la industria de la moda emplea millones de dólares en publicidad. La publicidad que vemos nos hace creer que un hombre exitoso viste algún traje fino de marca, una mujer exitosa debe contar con un buen físico, vestimenta y accesorios como bolsas de marca que “indiquen” su estatus social. En los últimos años parte de nuestra apariencia también es juzgada por la información que compartimos en nuestras redes sociales, incluso por nuestra seguridad se recomienda no compartir fotografías de artículos lujosos, viajes, cosas que pudieran demostrar nuestro nivel socioeconómico.
* Por lo que Decimos
Al conocer a alguien es muy difícil cambiar la primera impresión ya sea la que reflejamos o la que recibimos. Cuantas veces no hemos escuchado la frase “era tan guapo(a) hasta que empezó a hablar”, también es importante que lo que decimos concuerde con nuestras acciones, No podemos decir que nos preocupa mucho nuestro medio ambiente y después tirar basura en la calle. La educación también se muestra en la manera en que nos expresamos pues bien podemos observar a una persona bien vestida y si al hablar de diez
palabras ocho son maldiciones obviamente lo calificaríamos como “grosera” y una persona grosera no es considerada “culta”.
* Por Cómo lo Decimos
Los comunicólogos saben muy bien la importancia en “Cómo” decir las cosas empleando diferentes tonos de voz y gestos. La manera de decir las cosas te puede ocasionar o evitar problemas es según el modo en que lo empleamos; “en el pedir, está el dar”. No es lo mismo ir con nuestros vecinos y gritarles para que le bajen a su música, que ir amablemente y explicarles que en nuestro hogar hay un bebé que no puede dormir.
Desafortunadamente hemos crecido con estereotipos que absorbemos todo el tiempo, desde creencias de nuestros padres, nuestra sociedad y la publicidad que almacenamos a través de anuncios panorámicos, radio, televisión y redes sociales. Recuerda que nuestra imagen y manera en que nos expresamos es nuestra mejor carta de presentación.
